- ¿Me podrías indicar hacia donde tengo que ir desde aquí? pregunta Alicia.
- Eso depende de a dónde quieras llegar. Responde el gato.
- A mi no me importa demasiado a donde
- En ese caso, da igual hacia donde vayas
- Siempre que llegue a alguna parte
- Siempre llegarás a alguna parte, si caminas lo suficiente.
A Alicia le pareció que esto era innegable y es cierto, parece una conversación algo absurda.
El gato es una especia de Dios, aparece y desaparece cuando quiere, sin darnos cuenta puede estar presente a nuestras espaldas.
El gato aparece en nuestras vidas justo en el momento en que mas nos cuestionamos. Cosas como, ¿que sentido tiene la vida? Muchas veces son preguntas que nos hacemos y el gato nos diría, la vida tiene un solo sentido: hacia delante.
Esta es la idea que representa el gato: un cable a tierra, lo que reafirma la idea del gato. A veces nos apoyamos mucho en nuestras ideas y creemos saberlo todo, pero es obvio que si caminamos, paso a paso, llegaremos a algún lugar.
"No hay nada nuevo bajo el sol. La quinta pata del gato simplemente no existe, y eso es lógico, la vida no es tan complicada, todos estamos locos."
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